En esta línea se están llevando a cabo diversos proyectos relacionados con los menores en riesgo y la cooperación con la Justicia.

En primer lugar, se aborda la victimización en la infancia y adolescencia, como factor de riesgo importante para el desarrollo de problemas severos de adaptación y salud mental a corto, medio o largo plazo, incluyendo conducta antisocial y delictiva. La prevención e intervención eficaz en estas situaciones es imprescindible. El trabajo que desarrolla el grupo CRIM-AP con relación a la victimización intrafamiliar y sexual hacia niños, niñas y adolescentes tiene como objetivo general proporcionar conocimiento y nuevas herramientas a los SPI para la prevención y abordaje eficaz del problema.

En segundo lugar, y abordando la respuesta a aquellos/as menores que han cometido infracciones, el grupo lleva a cabo la evaluación del sistema de justicia juvenil de la CAV, trabajo que viene desarrollando desde hace dos décadas, a través de la colaboración con la Dirección de Justicia de Gobierno Vasco. Actualmente, se abordan específicamente los factores de riesgo de reincidencia, el desistimiento y la salud mental en menores infractores.

Finalmente, en esta línea se aborda también labores de investigación y asesoramiento a los servicios de cooperación con la justicia del Gobierno Vasco. Los resultados contribuirán a tomar decisiones basadas en la evidencia en estos servicios: Servicio Vasco de Gestión de Penas, Servicio de Atención a la Víctima y Servicio de Justicia Restaurativa. Esta colaboración resulta estratégica para el desarrollo de un modelo penitenciario que se caracterice por primar la justicia restaurativa y reparación de la víctima, y la búsqueda de alternativas a la privación de libertad siempre con el objetivo fundamental de facilitar la rehabilitación y reinserción social de las personas que han cometido actos delictivos y, en última instancia, la prevención de la criminalidad y el fomento de la seguridad en la convivencia social. 

En esta línea abordamos dos ámbitos directamente relacionados con el ODS 11 “Ciudades y comunidades sostenibles”.

El primer ámbito, a través del proyecto City4all, se centra en la percepción de seguridad y el uso del espacio público. Que nuestras ciudades sean seguras, y, además, se perciban como seguras por la ciudadanía, es un aspecto clave para la convivencia. También para la sostenibilidad, ya que se relaciona con usos más sostenibles y saludables del espacio público, como moverse a pie más frecuentemente; mientras que percibir el espacio urbano como peligroso limita la movilidad a pie y el disfrute del espacio público. Actualmente el grupo aborda la percepción de seguridad y el uso (o no) seguro y sostenible del espacio público en colectivos específicos: mujeres y colectivo LGTBIQ+, para lo que estamos empleando nuevas herramientas y metodologías orientadas a profundizar en los patrones espaciales y temporales de la percepción de (in)seguridad, y a capturar los aspectos del diseño y uso del espacio público que influyen sobre ella.

El segundo ámbito es también central para la construcción de ciudades y comunidades sostenibles, ya que abordamos las conductas sostenibles, que puedan contribuir a la mitigación del y adaptación al cambio climático. El cambio de conducta a nivel individual y grupal requiere identificar las barreras psicológicas y psicosociales que frenan los cambios, y ser capaces de promover el cambio conductual con estrategias novedosas. En ambos ámbitos aplicamos una perspectiva de ciencia ciudadana, promoviendo la participación e innovación social, y colaborando con otros grupos de investigación y otras entidades.