La eliminación de las rebabas es de vital importancia para obtener un buen acabado superficial en piezas del sector aeronáutico. Un simple desprendimiento de una de estas rebabas puede tener consecuencias catastróficas para los motores aeronáuticos, donde la velocidad de rotación es superior a diez mil revoluciones por minuto. A causa de esta problemática, la eliminación de estas rebabas se ha convertido en sí misma en una industria autónoma del mecanizado convencional.

Las rebabas aparecen en todo tipo de procesos de fabricación, como fundición o mecanizado, siendo estas la consecuencia de una proyección del material fuera de la zona de corte. Tradicionalmente las rebabas se han eliminado con herramientas manuales con o sin motor, de las cuales no pueden obtenerse los estándares de precisión y repetibilidad presentes en la fabricación aeronáutica. Para poder mejorar estos parámetros, se ha inventado el rebabado automático.

El CFAA cuenta con una célula de desbarbado para súper acabados, que cuenta con una turbina neumática acoplada con un control CNC. Está tecnología hace que el centro disponga de un método de alto rendimiento para el acabado de piezas de alto valor añadido, sin prácticamente ninguna restricción de geometría.