EHU-ekinean, 2ª temporada, 7º podcast: Oihana Cantero Domínguez.

Oihane Cantero Domínguez trabaja en un campo que está muy de moda: la inteligencia artificial. En concreto, investiga en el centro de investigación Orai, en el que trabaja personal de Elhuyar especializado en alta investigación en procesamiento de lenguaje natural y soluciones tecnológicas.

Teniendo en cuenta su trayectoria, parece que ha llegado a ser investigadora de inteligencia artificial casi por casualidad. "Soy hendaiarra, y todos mis estudios iniciales los he hecho en Seaska. El último año, suelen preguntar qué queremos hacer con nuestras vidas. Yo no tenía ni idea, como la mayoría, pero tenía claro que quería estudiar en euskera. Para eso tenía que venir a Hegoalde, y como no quería irme lejos de casa, miré lo que había en Donostia: había un grado en informática que despertó mi interés. Fui con la intención de probar un poco y allí aprendí a programar, y me gustó.”

Puntualiza que antes no sabía nada de programación, aunque su padre es informático. "Programar tiene una forma diferente de pensar, es otra lógica, se visualizan las cosas de otra manera, y todo eso me pareció interesante y atractivo".

En cuarto curso aprendió algo sobre inteligencia artificial y, a la hora de hacer el máster, se le presentaron dos opciones: una sobre procesamiento del lenguaje y otra sobre inteligencia artificial. Como esta última era en castellano, animada de nuevo por su pasión por el euskera, optó por la primera, aunque era en inglés: "Es verdad que en cuarto curso dimos cosas sobre el procesamiento de la lengua, y me interesaron", admite Cantero. Y dado que la investigación en este campo está ligada a la inteligencia artificial, es así como llegó a su puesto en Orai.

Precisamente, Orai investiga en dos áreas principales: en el lenguaje escrito y en el habla. Según Cantero, el trabajo de fin de máster se ha desarrollado desde el principio en el ámbito del texto, tratando de adaptar los modelos lingüísticos a la cultura vasca ya que adolecen de un notable vacío. "Además, para obtener buenos resultados, hemos tenido que hacer todos los experimentos en inglés, porque todavía no hay modelos en euskera". También trabaja el área del habla, con acompañantes personalizados, y está a punto de iniciarse en la síntesis de la voz.

Oportunidades, riesgos, brechas y esperanza

No hay duda de que los instrumentos de la inteligencia artificial son poderosos, pero también tienen sus riesgos. "Por eso hay que saber aprovechar las ventajas de la herramienta y poner medidas para rebajar el riesgo. Hay que tener cuidado de no normalizar demasiado: hay que mirar con espíritu crítico, es decir, si sabemos que esta herramienta tiene algún problema, no lo vamos a dejar así y vamos a intentar solucionarlo". Justo a eso se ha dedicado Cantero, tratando de corregir los sesgos culturales de la inteligencia artificial.

También ha citado otros sesgos, como los relacionados con el género y la raza. Y en los estudios de inteligencia artificial también es evidente la brecha de género. Según Cantero, acudió a la universidad sin prejuicios, pero en el grado de informática los hombres eran mayoría. Luego, en el máster, gracias a las féminas que venían de la lingüística, ese factor se equilibró. Ahora, sin embargo, en el grupo de trabajo, las mujeres vuelven a estar en minoría.

A la pregunta de qué se puede hacer para reducir esa brecha, responde rápidamente: "Hay una manera: contratar a más mujeres". Tiene claro que hacen falta más, empezando por los estudios. "Hay alumnas, pero son menos, así que igual hay que empezar a arreglarlo por ahí". La mayor presencia de mujeres informáticas también puede ayudar a animar al resto a que realice esos estudios.

Sobre la investigadora

Oihane Cantero Domínguez nació en Hendaia en 1999. Tras cursar el grado en informática en la UPV/EHU, ha cursado el Máster Universitario en Análisis y Procesamiento de la Lengua en la misma universidad. Actualmente es investigadora de Orai, centro tecnológico de inteligencia artificial.

El podcast de EHU-ekinean es una iniciativa del Vicerrectorado de Desarrollo Científico-social y Transferencia. 
El artículo se ha publicado originalmente en Zientzia Kaiera. 
Texto: Ana Galarraga / Elhuyar Zientzia (CC-BY-SA-3.0).