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Este jueves 24 de Marzo, a las 19.00h, va a tener lugar en la sala Oxford Aretoa de Zumaya la inauguración de la exposición titulada Feten realizada por el profesor de BBAA de la UPV/EHU, Fito R.Escudero.
La exposición estará abierta hasta el 10 de Abril
horario/ordutegia: 18.00-20.00h
festivos/jai-egunetan: 12.30-14.00h/18.oo-20.00h
Oxford Aretoa
Erribera kalea 23
Zumaia
Cuando alguien pregunta: “ ¿ De donde saca todo eso? “, la respuesta es: “de ti.”
Henry Miller
A la hora de hablar de mi práctica pictórica en relación con cualquier concepto del tipo que sea, creo que lo que toca es hablar de sensaciones, sensaciones compuestas de preceptos y afectos más que de conceptos en sí mismos.
Así más que hacer un análisis de mi pintura creo más adecuado hablar de relaciones, asociaciones dentro del propio acto pictórico; más que hablar de pintura, hacerlo de lo que la pintura hace y lo que la pintura nos hace.
De esta forma, a la hora de relacionar mi pintura con algo la relacionaría con dos cosas que tienen ese algo de flujo vital del acto pictórico con el que me identifico. Con las sensaciones en general y la pasión en particular, con toda esa gama de sucesos irracionales que ocurren, a veces, en el acto pictórico, con esa especie de lógica paradójica basada en analogías y contradicciones de la que hablan algunos autores.
Por un lado, entonces las sensaciones. Pintamos con sensaciones y pintamos sensaciones, creo que somos una especie de receptáculo de sensaciones. A veces es el punto de partida de un proyecto artístico a nivel emocional e intelectual. Aunque este varíe en el propio proceso, puede ser una especie de principio organizativo.
Si esas sensaciones pueden estar en el origen o la causa de mi proceso creador, a esas sensaciones le doy, quiera o no, un cierto sesgo, un sesgo, que creo que es consecuencia, tiene que ver, con la mayor o menor pasión que ponga o sienta en la realización de una obra.
Y por otro lado la pasión: la pasión no significa deseo, amor, goce, sino algo más ambivalente. Nos dicen que la pasión quiere un imposible, algo así como “el dos en uno: la pasión produce insatisfacción, padecimiento e infelicidad pero todo ello no como una imperfección o una carencia o una falta. Esta imperfección puede ser sentida como suma perfección y maravilla, puede llegar a tener un estatuto reflexivo. Lo que menos puede llegar a querer es satisfacerse. Lo que quiere es retroalimentarse. Y ese sujeto pasional, que es lo que puede ser un pintor (como yo o cualquier otro) en relación a su obra, puede llegar a tener un poder fundacional, una base firme, una premisa, un orden estético, con el que abordar el acto artístico, y en mi caso concreto el pictórico.
Creo que este conjunto de sensaciones que se puede tener como marco de referencia y la pasión que pueda imprimir en el propio acto de pintar puede concretarse en pintar fuerzas, fuerzas que deforman y ejercen una influencia sobre la forma. Hay quien dice que “ Si no hay fuerzas no hay cuadro”. Pues eso.
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